El origen del Corrido Afro-Mestizo

El origen del corrido Afro - Mestizo

500 años de historia.

Los núcleos negros que en México todavía pueden ser considerados como tales, derivan principalmente de los cimarrones que reaccionaron contra la esclavitud y se mantuvieron en libertad.

Estos núcleos son los actuales de la Costa Chica de Guerrero y de Oaxaca, quienes marcaron profundamente el carácter de la sociedad Afro-Mestiza.

La responsabilidad de fundar una sociedad independiente con respecto al poder colonial, estuvo determinada por una respuesta armada y agresiva. En el origen mismo de la sociedad Afro-Mestiza, se ubica la violencia como mecanismo o instrumento indispensable para subsistir como individuo y como sociedad, de ahí que el carácter violento venga a integrarse como un pilar de la identidad de un grupo.

Frente al poder colonial hubo dos actitudes distintas de indígenas y negros. Los primeros optaron por el alejamiento y la concentración, se agruparon y formaron nuevos pueblos en lugares poco accesibles en donde la vegetación les puedo proteger, aislar y proporcionarles los medios para reproducirse biológica y culturalmente; y los segundos aplicaron la táctica de movilidad y dispersión.

El poder colonial tuvo tolerancia ante la respuesta de los indígenas, no así con los negros, el objetivo principal era aniquilarlos, pues constituían un mal ejemplo.

Desde 1579, fue dada la orden del Virrey Martín Enríquez para que se persiguiera y se castigara a los negros. Para 1591 en Cuajinicuilapa, estos ya se habían concentrado en pequeñas cuadrillas con el objetivo de convertirlas en un bastión de libertad.

Es perfectamente comprensible la táctica de los negros cimarrones: fundar un pueblo y residir de forma permanente en él, significaba colocarse en el blanco del ejército colonial. Los negros rebeldes que se encontraban en Cuajinicuilapa, San Nicolás, Santo Domingo, Maldonado, Juchitán, Nexpan, Cruz Grande, Las Garzas y el Palomar, se movilizaban constantemente evadiendo el control militar y el pago de tributos.

La Costa Chica de Guerrero no quedó al margen de los movimientos políticos de independencia y de la revolución, pero tampoco vemos cambiar radicalmente las condiciones sociales en la región.

En Cuijtla, Aguirre Beltran se percató que en los corridos quedaba el testimonio de la violencia en sus diferentes manifestaciones, es por ello que en su investigación encontramos citas y ejemplos de estos, además de agregar un capítulo sobre la legua y el corrido.

Si bien a lo largo del estudio, es palpable el comportamiento violento de la sociedad Afro-Mestiza cuando se refiere a la brosa específica: “Encontrarse con las formas de asociación mencionadas existen en Cuijtla y en las vecinas comunidades negras, otra forma de agrupamiento en la que la agresión oral, física y sexual no solo es permitida si no que aún se exige y se alienta. Nos referimos a la corporación, al conjunto de individuos que por un motivo u otro han entrado en conflicto con la ley o con la comunidad y cuya alianza recibe el nombre de brosa".

Las luchas Agrarias se incrementaron considerablemente, estas brosas hasta el punto de constituir un constante peligro para los blancos establecidos en la región y aún para las autoridades locales compuesta por ancianos a cuyo cargo estaba la conservación de las costumbres tradicionales y de las formas conocidas de tenencia de la tierra.

jalil@adncultura.org