La fiesta  y el sátiro de musas de Roxana Cortés

 La fiesta 

y el sátiro de musas* 

Por: Doña Incendio de Desdémona  (seudónimo) 

Acto primero 

 Entran por una puerta, Jacinta se dirige al público mientras don Juan la mira 

Jacinta:

En la Parroquia de Santa Prisca se gesta un niño, es plateresco. Su fe de bautismo dicta un escribir, más fuera de la tradición, bello. Sus padres, Pedro y Leonor, lo nombran dando honor a San Juan Evangelista.

Sobrevive entre las crisis de las minas, pues «para querer, no pienso que ha menester licencia la voluntad», y él quiso. Un mundo nuevo entre la España y la Nueva, porque «llegar al fin, sin pasar por los medios, ¿no es ventura?».

Don Juan:

Soy venturoso: camino por la plazuela y su olor adoquinado. Lo dices bien, Jacinta, he nacido y el fruto de mi pluma es ventura. Daré mi voluntad cual «pájaro que estrena el viento». Una tarea tengo entre lo que ya me ha sido encomendado: hablar, sin riqueza ni hermosura, pero hablar bien, porque las paredes sospechan. Y mi verdad no está adornada sino de júbilo y proeza.

*

Acto segundo

Lucrecia entra, dirigiéndose a don Juan y a Jacinta

Jacinta:

Es verdad, aunque te envidian por tu talento y se burlan por tu físico. Más, todos tenemos deformidad —física, o dentro del alma—: una joroba, una mano inmóvil o un pie que cojea. Don Juan, tú sabes que lo bello descansa en tu cabeza, y al resto del cuerpo da batalla con su inteligencia. Por eso pido, «así los cielos, que os dan belleza, os den larga vida».

Lucrecia:

Lo sabe Jacinta, tus manos son «bellas, engazaduras de plata». Nos enseñan a crear un personaje semejante a nosotros mismos, pero en vano es, porque el otro nos reconoce. Don Juan, el otro es uno, es la celebración de hallarnos en tu canto. Aún entre la muchedumbre, tu sabiduría no cede ante el juez de oro y la belleza. Porque para tus manos y tu obra, es merecer este elogio descriptivo.

*

Acto tercero

Una pléyade de taxqueños entra, uniéndose a Lucrecia y Jacinta, don Juan está en el centro

La pléyade:

Este es nuestro regalo: el afecto desinteresado. Dios creó el principio, y tu siglo áureo «ganó amigos». La fiesta es de todos, nos une. Porque «grande fiesta, así es la fama», a tu vida más que a tu palabra.

 

Don Juan:

«San Juan es fiesta de todos», carro de comedias nuevas cada día. Hombres, mujeres y niños. Una comunidad vecina que se abraza. Una ciudad viva a través del teatro.

FIN

* Poema escrito con base en versos y personajes de las obras La verdad sospechosaLas paredes oyen, Elogio descriptivo, Todo es ventura, y Ganar amigos, de Juan Ruiz de Alarcón.