Un poema del Ometepequense Pedro Peñaloza Carmona

Sabes, si, si lo sabes

 

Sabes,

tal vez te extrañes al escuchar estas palabras

pero déjame decirte lo que siento

déjame expresar en estas letras

lo que aun encierra mi pensamiento

y que al plasmarla con mi pluma en esa hoja

vienen a mi llegando los recuerdos

 

Sabes, si, si lo sabes

las hice pensado en esos días

pensando en las veces que decías

que yo era el dueño de tus sentimientos

 

Sabes, si, si lo sabes

que quedaron muchas cosas sin decirse

y que muchas caricias quedaron desoladas

cuantos besos quedaron en nuestras bocas

y esas ansias de amar aprisionadas

 

Sabes, si, si lo sabes

que dentro, de estas cuatro paredes en que me encuentro

son testigo de mis íntimos secretos

y que esperan el aroma de tu cuerpo

mientras vienen a mi mente más recuerdos

de aquel amor que se quedó en silencio

 

Sabes, si, si lo sabes

que aún recuerdo, ver cuando tus ojos

se cerraban, al sentir el aliento de los míos

y cuando bebía la miel de esos tus labios

inundando a tu cuerpo un escalofrío

mientras sabía tus más íntimos secretos

 

Sabes, si, si lo sabes

que ahora el tiempo separo nuestros destinos

ya no tengo el amor que profesabas

se apagó, como la lluvia apaga la llamarada

que dejo sin flores el camino

 

Sabes, si, si lo sabes

que a pesar de que el tiempo ha transcurrido

aún sigo perdidamente enamorado

y que espero muy paciente, que algún día

regreses a devolverme la alegría

y te encuentres nuevamente aquí a mi lado

 

Sabes, si, si lo sabes

que te hubiera amado, como un loco

que hubiera hecho reír a la tristeza

por qué sabes y si, si lo sabes

que te hubiera amado de los pies a la cabeza

y eso, si, si lo sabes.

Pedro Peñaloza Carmona