Abelina y Saldaña convirtieron la FILA 2022 en más de lo mismo
Se llevó a cabo en el centro de la ciudad una esperada Feria Internacional del Libro Acapulco 2022, que tras cuatro años de ausencia se anunció con altas expectativas; sin embargo, el gobierno en turno lo saboteo al convertirlo en un acto político donde el influyentismo, la presencia de gente armada, la zona fifí y el acarreo de personas fueron el sello del encuentro literario.
Desde el inicio de su gobierno, la polémica y criticada alcaldesa Abelina López Rodríguez, estableció -al menos en el discurso- que la cultura sería "eje de su gobierno", sin embargo, con el paso de los meses no solo ha mostrado su incapacidad al frente de la alcaldía, sino también el hambre de protagonismo para ganar terreno en el ámbito político, utilizando para ello el aparato gubernamental para ese propósito personal, afectando con ello el buen funcionamiento de las diferentes áreas del ayuntamiento porteño.
La FILA no podía faltar en la lista de acciones de gobierno en los que alcaldesa y su secretaria de bienestar buscaran lucirse, aprovechando la presencia del público y amigos de los participantes en las mesas y presentaciones de libros, todo con el fin de validar su desgastada imagen debido a su falta de oficio político y su actitud prepotente que le ha llevado a encontronazos con medios de comunicación, personal del ayuntamiento y directores de dependencias que han tenido que salir de la administración para no seguirle el juego de reina faraónica en la que se ha mantenido desde el inicio de su mandato.
Dentro del programa que comprendió participaciones de personajes provenientes de España, Venezuela, Canadá, Uruguay y Nicaragua, además de los escritores locales, parecía que nada podría salir mal, sin embargo, la lucha de egos se acrecentó al final de la jornada de la mencionada feria cuando le tocó a la UAGro participar, donde el ex rector -al menos de manera oficial- Javier Saldaña, llegó con porras al escenario principal sin importar que en ese momento se estuviera desarrollando una mesa de lectura, lo que provocó la molestia de los participantes y que después fue retomado en redes sociales por la poeta Azul Ramos, desde donde invitó a sus pares a no permitir esas actitudes de líderes políticos que ven estos eventos como escenarios o foros de concurso de porras para impulsar su imagen, para lo cual llevan gente acarreada para llenar espacios y especular su supuesta popularidad.
Por su parte, el portal de noticias Trasfondo Noticias, que dirige el ex director de cultura Julio Zenón Flores, denunció en Facebook la presencia de gente armada en el evento, a esto habría que agregar la poca y a veces nula presencia policiaca en la zona durante la mayor parte de los eventos.
Cabe mencionar que otros señalamientos fueron en torno a la nula difusión del evento con la anticipación debida, y como se manejó casi en secrecía quienes serían los participantes, también el señalamiento que hubo talleristas que no cumplieron con los días que se marcaron en el programa del evento, así como el hecho de que el ayuntamiento no fue capaz de realizar las transmisiones en sus redes sociales de todos los eventos en las dos sedes, quedando en el rezago el alcance del mismo para públicos en medios digitales, esto pese a ser un evento anunciado como Internacional. Incluso habría que agregar que la Dirección de Cultura ni siquiera cuenta con página en redes sociales. A la par, hubo comentarios en el sentido de que mucho de lo presentado es material de años pasados.
Tal es la falta de oficio de la alcaldesa y el equipo que le rodea, que incluso en un evento montaron su pícnic con café y pan, mientras que en otro caso la alcaldesa ignoró a los participantes de una mesa de lectura y lejos de atender lo que se estaba diciendo en el escenario mejor se puso a leer, restando importancia a un evento al que siempre llegó tarde.
La nobleza de los participantes, el esfuerzo de los organizadores, quedó opacado por un grupito que tal como muchos lo auguraron, resultó ser más de lo mismo, de un antiguo régimen, donde al parecer aprendieron bien la lección. Una vez más queda demostrado como los enemigos principales de Acapulco, son la clase política y sus ambiciones de protagonismo y poder.
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