El amor es la prórroga perpetua,
siempre el paso siguiente, el otro, el otro
-Los amorosos / Jaime Sabines-
En 1947, un joven oriundo del sur de México, chiapaneco, llamado Jaime Sabines, escribió el poema “Los amorosos”. El ingenio y talento combinado con la destreza del uso del lenguaje, con apenas veintiún años, trazó las líneas que lo llevarían a ser un referente de la literatura no solo en nuestro país sino más allá de nuestras fronteras. Para muchos, un poema de amor; para otros, una queja sentida; y otros más lo califican como un retrato de diversos episodios sobre el estado de aquellos que han sido reducidos y arrasados por el amor. La lectura es propia, el secreto de la percepción es el bagaje individual de los vivientes y sobrevivientes, que se "ponen a cantar entre labios una canción no aprendida" o "los que se van llorando, llorando la hermosa vida".
El pasado sábado 10 de agosto en el Centro Cultural y Deportivo del ISSSTE, se presentó la obra PHYLOS bajo la dirección del maestro Manuel Maciel, una puesta en escena que desde la poesía crea una narrativa que se desarrolla en las entrañas del espectador, generando una lectura propia, profunda y a la vez espontánea, al descubrir hallazgos vivenciales que reflejan la realidad interiorizada y conocida.
Producto de la creación colectiva, bajo la dirección del maestro Manuel Maciel, la representación escénica fue tomando forma en la mente de los espectadores desde antes de iniciar la función. El sonido y los elementos previamente colocados en el espacio dejaban volar la imaginación sobre lo que sucedería en los casi sesenta minutos que dura la obra.
“¿Tú qué haces cuando te descubres en mitad del caos? ¿Qué haces cuando tu corazón roto sigue latiendo a pesar del dolor? ¿Cómo sigues? ¿Nosotros? ¡Bailamos!” anunció días previos Manuel Maciel en sus redes, dejando entrever lo que la obra exploraría durante su desarrollo.
La compañía teatral La Gruta, Agua y Carrizos Libres, Emanuel Duque, Estos Vatos Crew y Moondance Mover lograron - de acuerdo a las propias palabras de los asistentes - hacer un recorrido sensorial y vivencial, mostrando cómo nos relacionamos los seres humanos y la forma de encauzar lo que nos sacude desde las entrañas. La obra trata de cómo construimos esa narrativa, porque siempre hay una narrativa.
Texto: pabloreyes@adncultura.org
Fotos: ADN Cultura