Miley Cyrus – Plastic Hearts_
- En su séptimo álbum de estudio, Miley finalmente ha encontrado terreno firme, en una de sus producciones más sólidas y potentes de su carrera.
Tres años después de su era "cantante pop femenina incursiona en el Country" con "Younger Now", y a un año de su primer adelanto de su próximo material "She Is Coming", Miley Cyrus se encontraba en el proceso creativo de lo que se conocía hasta entonces como "She Is Miley Cyrus", pero a lo largo de estos dos años hubieron varios altibajos personales, entre su muy publicitada separación de su esposo, el actor Liam Hemsworth, y por si fuera poco parte de las canciones que ya había grabado se perdieron durante el incendio de su hogar en Los Ángeles, por lo que aprovechó buena parte de la cuarentena de este año para retomar desde cero el que se ha convertido en su séptimo álbum de estudio: "Plastic Hearts", para el cual ha contado con la producción de The Monsters & Strangerz, Mark Ronson, Andrew Watt y Andrew Wyatt.
El álbum arranca con "WTF Do I Know", un electrizante corte en el que Miley no se disculpa por nada y por nadie, y de paso se lleva entre las patas a su ex marido, mientras que el track titular denota influencias de aquel "Symphaty For The Devil" de The Rolling Stones, algo que le asienta bastante bien además de su rango vocal que puede cantar cualquier melodía que le toquen. Quizás una de las colaboraciones que mayor anticipación tenía, ese "Prisoner" principalmente por contar con Dua Lipa, al final tristemente se queda muy a medio camino a comparación del resto del disco -aunque se le agradece el tallado de pelucas de ambas en su respectivo videoclip oficial-, mientras que la contraparte "High", producida por Mark Ronson, denota una relación tóxica de la cual Miley se ha vuelto adicta y que bien podría ser influenciada por aquel clásico de Poison "Every Rose has its Thorn". Algunos de los cortes como el que apertura el disco, tal parecieran ir con ciertas dedicatorias: "Angels Like You" se rumorea ir dirigida a Kaitlynn Carter, con quien la artista tuvo un tórrido y pasajero romance el año pasado a los pocos días de haber terminado su matrimonio con Hemsworth, mientras que la magistral "Midnight Sky", sin duda una de las mejores canciones de este año, pareciera ser con dedicatoria a su último ex novio, el cantante Cody Simpson. Y si no fueran suficientes las influencias rock predominantes en este material -"Gimme What I Want" tiene un enorme parecido a "Closer" de Nine Inch Nails que bien Trent Reznor ya debería de estar preparando la demanda por derechos de autor-, encontramos un par de invitados que sorprenden desde el primer momento en el que fueron confirmados en el tracklist: Billy Idol "resucita" en la imperdible "Night Crawling" que literalmente pide a gritos ser próximo single y que pareciera rendirle a él un homenaje en vida, mientras que en "Bad Karma" ha reclutado nada menos que a Joan Jett, dando otro gran resultado final -mención aparte, "Never Be Me" bien podría haber sido una colaboración con Pat Benatar, para cerrar con broche de oro la trilogía legendaria del rock ochentero-. Además, ha dejado como bonus tracks unas verdaderas joyas previas: su versión remix de "Midnight Sky" con otra leyenda, Stevie Nicks, la cual samplea su tema "Edge of Seventeen" pero que su voz es la actual, el cóver de "Heart of Glass" que interpretó en su set en el iHeart Festival, y el sorprende cóver de "Zombie" de The Cranberries en el festival Save Our Stages.
"Plastic Hearts" cubre con todas las expectativas que nos ha dado Miley Cyrus a lo largo de estos últimos años, y que a pesar del cambio radical de rumbo artístico debido a algunos imprevistos, el resultado final es el mejor álbum de su carrera, con una coherencia de principio a fin, mostrando a una artista en total plenitud profesional y personal, en donde los sonidos rock ochenteros la han allanado a territorios donde se ha ganado el respeto de críticos y público -algo que no debería de sorprendernos, puesto que desde hace una década ha dejado varios cóvers imperdibles, por lo que solamente era cuestión de tiempo de que nos diéramos cuenta-.
Calificación: 8.5 / 10.
Fotos: Cortesía.