Ángel Tavira Maldonado, nacido el 3 de julio de 1924 en Corral Falso, Guerrero, es una figura prominente en la música mexicana, especialmente reconocido por su destreza con el violín y su contribución al son calentano. Desde una edad temprana, Tavira se sumergió en el mundo de la música, aprendiendo a tocar el violín de manera autodidacta y siendo influenciado por las tradiciones musicales de su región natal.
El son calentano, un género folclórico de la Tierra Caliente, se caracteriza por su energía y su uso distintivo de instrumentos como el violín, la guitarra y el tamborita. Tavira no solo dominó este estilo, sino que también lo enriqueció transcribiendo la música a partituras de numerosas piezas que reflejan la vida y la cultura de su tierra.
A lo largo de su carrera, Tavira enfrentó múltiples desafíos, incluyendo la pérdida de su mano derecha en un accidente. Sin embargo, su pasión por la música y su determinación lo llevaron a seguir tocando el violín con una prótesis, adaptándose y demostrando una impresionante resiliencia y dedicación a su arte.
Ángel Tavira no solo fue un músico talentoso, sino también un defensor del patrimonio cultural de México. Su legado incluye no solo sus composiciones, sino también su labor como maestro, transmitiendo su conocimiento a nuevas generaciones de músicos. En reconocimiento a su contribución a la música y la cultura mexicana, recibió varios premios y honores a lo largo de su vida.
Tavira también ganó reconocimiento internacional cuando fue interpretado por el actor Don Ángel Tavira en la película "El Violín" (2005), dirigida por Francisco Vargas, la cual recibió aclamación crítica y numerosos premios, incluyendo en el Festival de Cannes.
Ángel Tavira falleció el 30 de junio de 2008, pero su influencia y su música continúan vivos, inspirando a músicos y amantes del son calentano en todo el mundo. Su vida y obra son un testimonio del poder de la música para trascender obstáculos y celebrar la rica diversidad cultural