El aroma de la brasa y la magia de la sal: el nuevo menú de Península Restaurant
El sol se pinta en tonos de oro sobre el horizonte de Cabo Marqués, bañando con su luz los secretos culinarios de Península Restaurant. Es aquí, en el corazón de Riviera Diamante Acapulco, donde el chef Manuel Pérez ha forjado un menú que va más allá de la mera degustación, es una experiencia que despierta los sentidos.
La cocina de Península tiene insumos regionales, como la jamaica, maíz, cilantro, entre otros, los cuales se suman a esa propuesta de autor que dirige el chef Pérez.
La brasa chisporrotea con ansias, acariciando cada ingrediente con su aliento ahumado. El aroma de la madera impregna el aire, prometiendo una cocción perfecta y un sabor inigualable. Pero el secreto no yace solo en el fuego, sino en la sal. Cinco variedades, cinco universos de sabor: Flor de sal, sal del Himalaya, sal ahumada, sal de gusano y sal de Colima. Cada una, una puerta a una dimensión culinaria distinta.
En el escenario de Península, las estrellas son los platos recomendados por el maestro Pérez. El "Aguachile de New York" emerge como una sinfonía de colores y texturas, una oda al frescor del mar y la tierra. La "Pizza Sonorense" es una fiesta de sabores, un homenaje a la tradición y audacia mexicana. Los "Camarones Rellenos" son una danza de contrastes, una sinfonía de queso y mar.
Desde las pastas y pizzas que abrazan el alma, hasta los cortes en la parrilla que acarician el paladar, cada plato es una obra maestra en sí misma. Cada bocado, una poesía de sabores que transporta a los comensales a un viaje gastronómico sin parangón.
El caldito de camarón Barra Vieja servido en cazuela con zanahoria, papa y camarón pelado, un placer muy ad hoc para disfrutar en La Rivera Diamante Acapulco. La crema flameada de elote servida en pan campesino (de tres harinas) y tropiezos de panceta ahumada es una verdadera experiencia culinaria, de esos platillos que uno puede hacer alarde de haberlos degustado.
Mención especial del pulpo a las brasas con papa frita a la parmesana y chimichurri (recomendación del chef), con ese aroma sutil que solo la brasa le puede dar, es un deleite de proteína del mar. Y la arrachera también con ese toque de brasa se agrega al nuevo menú de Península.
El mar y la tierra convergen en el "Taco de Chicharrón Mar y Tierra", una explosión de sabores que despierta los sentidos. La "Hamburguesa de Camarón" es una sinfonía de texturas, una delicia para los sentidos. El "Panini Mexicano de Arrachera" es un tributo a la esencia del país, una oda a la carne y el fuego.
Para culminar esta odisea culinaria, los postres nos esperan con ansias. Por mencionar algunos: "Reconstrucción de Chocolate Amargo" es un deleite para los amantes del cacao, un abrazo cálido en forma de postre. El "Tazón de Helado de Coco" es un sueño tropical hecho realidad, una explosión de frescura y sabor, también recomendación del chef.
El restaurante Península abre sus puertas a este nuevo capítulo culinario, guiado por el inigualable chef Manuel Pérez Salmerón. En cada plato, en cada detalle, se encuentra la pasión de un maestro y el alma de una tierra. Península no solo es un restaurante, es un viaje a través de los sentidos, una experiencia que se graba en la memoria y el paladar. Es, sin duda, una joya en la corona de Mundo Imperial.