Entrevista con la escritora Ana Saavedra Villanueva

De Querétaro para el mundo: Ana Saavedra Villanueva

                                                                                     Yessika María Rengifo Castillo 

La escritora mexicana Ana Saavedra Villanueva recorre en su literatura un llamado constante al tejido social como brújula a los matices del accionar humano. Es hija del Realismo Mágico. No es sólo el rostro de esas mujeres de Hispanoamérica, que trabajan por el bienestar de su familia, la ciudad y el país. Es también una tejedora de historias, transitando por las causas y los azares del mundo, a partir de ese juego poético y narrativo al que tiene acostumbrados a sus lectores. 

Desde ese escenario, es un placer que en esta helada tarde de Bogotá nos acompañe la encantadora Ana Laura Saavedra. 

¿Quién es Ana Saavedra Villanueva? Soy una soñadora en el sentido más literal de la palabra. Vivo mis sueños como mi vigilia. Soy madre de dos mujeres con la responsabilidad de dejar en ellas el mejor ejemplo que me sea posible. Soy sensible en extremo y mi medio de expresión (entre otros) es la escritura. Soy habitante de libros. En términos formales, Lic. En Ciencias de la Comunicación, fundadora de Anaquel Literario, Directora de creación literaria en la Fundación Cultural México Orgullo y Tradición. Y tengo la fortuna de ser ganadora de algunos certámenes literarios y de participar en varias antologías, revistas culturales, medios audiovisuales, así como colaborar con EDUCAL y radio UAQ, 89.5 FM, con cápsulas sobre escritores.

 ¿De dónde nace la escritura en ti? 

De la indignación, de la impotencia, del cariño y el amor. En sí de todos aquellos         sentimientos que soy testigo y mi vehículo para exponer mi opinión puede convertirse en una historia. Soy una lectora asidua, pero un buen día hace unos once años escribí en una de mis libretas “Estoy cansada de vivir en historias que no me pertenecen”. Así fue como determiné que comenzaría a escribir las mías propias. 

 ¿A qué sabe bordar historias de Querétaro o capítulos del mundo?

 Al escribir fluye la sangre en mi cuerpo de forma distinta. Puedo sentir su electricidad, tengo que calmar mis latidos para impedir que se desborden y le cuesta trabajo a mi mente seguirlos. Es para mí pura emoción. Poder dejar testimonio a mi paso es lo que me lleva a encapsular escenarios y personajes. “El día que yo no esté quiero que mis palabras permanezcan”. Es otra de mis bases para escribir, una que también anoté en su momento en mi libreta favorita.

¿Cómo nace Anaquel Literario? 

Nace del vacío. Con una niña de un mes en una ciudad nueva, con la posibilidad de enfrentar depresión post parto y con la convicción que la literatura es medicinal. Todo ello se conjuntó en un grupo de lectores y escritores independientes que me permitieron conocerlos, leerlos y quererlos ayudar a darse a conocer. Esto comenzó ya hace once años. 

¿Cuál crees que es el éxito de Anaquel? 

No sé si tenga éxito como tal. Pero el lugar que se ha ganado es resultado en un inicio, de la persistencia y terquedad de su fundadora (¿la conoces?) pues hubo varios años en que únicamente fui yo la que sostuvo el concepto y el trabajo que implica, por el cariño y respeto que me merece. Y desde luego a la fortuna de que en el camino encontré gente fabulosa que ha sumado en el pasado, sigue sumando en el presente y seguramente llegará nueva en el futuro. Esto es un apostolado cultural y cada vuelta de sol se reúnen nuevos apóstoles. (Lo sé por experiencia). 

Tierra de apariciones
Tierra de apariciones

¿Cuéntanos sobre Tierra de apariciones? 

Con este libro saldé la deuda pendiente con mis antepasados. Es para mí un bálsamo a su memoria, es mi regalo y anexo a su “descansen en paz”. Es un libro genuino que abraza los recuerdos de mi niñez, las palabras de mi madre y familiares, los lugares en que dejé mis huellas en otro momento. Son 31 relatos de fantasmas muy latinos. Esos que viven entre nosotros por muchas más razones que las de “asustarnos”. Esos que como sociedad interiorizamos hasta hacerlos nuestros y dejarlos vivir entre nosotros. Es el resultado de tres años de trabajo, de un sueño cumplido, de mil satisfacciones personales. Los relatos están acompañados de ilustraciones a carboncillo hechas también por mí. Al final, es un exorcismo que me permitió vaciar tantas cosas que cargaba y ahora viven entre sus páginas. 

¿Dónde lo podemos conseguir? 

Directamente conmigo en la página que tengo de escritora y que les invito a seguir: https://m.facebook.com/escritoraqueretana

 ¿Qué consejos nos dejas a la hora de escribir? 

El más útil. Que no esperen al momento “perfecto” para comenzar. Ese momento no existe y es una ilusión perseguirlo. Que escriban en la cama, en la sala, en la mesa; ya sea de día o de noche. Que las ideas llegan, pero son celosas y si no las atrapamos se van volando. Que existen miles de métodos para escribir, pero sólo uno te funcionará a ti y ese solo lo encontrarás mientras escribes.

No podemos negar lo que está ocurriendo en el mundo y tú defensa en favor de los derechos humanos. ¿Qué mensaje frente a lo que ocurre en Ucrania y Rusia? 

Me horroriza ver lo dividido que está la sociedad ante el problema. Me indigna que las opiniones polarizadas vayan por encima de las muertes y el sufrimiento. Me asusta saber que ante el conflicto real en que se juegue la vida, realmente estamos solos. Me entristece constatar que el manejo de información es tal que el concepto de “libertad de expresión” es válido solamente en el diccionario. Mis oraciones están con las víctimas (que las hay de ambos lados). 

Ha sido un placer tenerte en casa. ¿Tienes algo más qué contar?

Muchas gracias por estas preguntas que me hicieron viajar a lugares queridos. Un abrazo.