La alfarería de Dios: texto de Ángel (El Halcón) Domínguez Espinoza

La alfarería de Dios

Ángel Halcón Domínguez Espinoza

A Juan Camacho

A Luis Morga

1

Abro los ojos y descubro que todo es nuevo en mi cuarto, ¿dónde había estado antes?, ¿en qué cama dormía?, ¿de dónde vengo? Un sol rojizo ilumina mi rostro, me encuentro desnudo frente a un hombre que no conozco, sonriendo dice: soy tu Dios. Lo contemplo en silencio, estiro mi mano, le suplico por una botella de agua mineral, para la resaca que tengo.

2

Mi corazón jadea como un perro, ante esos labios que derrotan mi pensar, transito a la deriva sobre su cuerpo, como lo hago en calles iluminadas, no soy el mismo. El amor es una serpiente socavando nuestras vidas.

3

Tomo en mis manos una revista pornográfica, como viento sobre la hierba ojeo sus páginas. Un deseo carnal se desprende desde las plantas de mis pies, mis ojos relampaguean ante la desnudez de aquellos cuerpos. Ahora dudo que la mujer salió de una simple costilla.

4

El hombre y la mujer están constituidos, tal cual animales de la creación, como jumentos nos duele la espalda por la carga a cuesta, somos pájaros en busca de nuevos campos, un amasijo de telarañas en la memoria, las lágrimas saladas nos hermanan con los peces del mar. Somos del mismo barro y seremos del mismo polvo.

5

El semáforo ahora está en verde, cierro los ojos, enciendo un mundo oculto, cruzo una calle y del otro lado se encuentra el destino, nada nos detiene, somos andantes hasta encontrarnos con nuestra tumba, ahí abriré los ojos para el juicio de Dios.

6

Al amanecer los perros callejeros buscan en la basura migajas, el viento los mira con ternura, se detiene por un instante, con sus extensas manos acaricia sus lomos y los toma del hocico, a jalones los lleva donde hay comida, ellos no agradecen este gesto, todo lo atribuyen al don de su olfato. ¿Hay alguien que también nos guíe en secreto?

7

Aquella mañana en el supermercado me percaté que aquel hombre con el que conversé  era Dios. Vestía pantalón de mezclilla, tenis blancos y camisa de cuadros; convirtió panes en peces, peces en ofertas. He comprendido que los milagros evolucionan, como besos convertidos en botellas de vino. Dios está actualizado, predica su palabra entre teclados de cajas y cortes de tickets.

8

Te voy a construir a detalle, no tengo el poder de Dios, para crearte en una brevedad, no bastará una sola palabra para ordenar tus huesos, me costará trabajo y tiempo moldear tu cuerpo, lo sé, pero no llevo prisa, voy a formar tus manos, limpias de todo secreto, con el polvo de mi cuarto te haré pies ligeros, para que vengas a mi encuentro, ojos enormes que sólo miren al cielo, en vez de escápulas te pondré dos gigantes alas, llevarás en el pecho una puerta abierta, en tu boca plantaré un viñedo, no te bautizaré con algún nombre, en eso tendrás la virtud de ser libre.