José Saramago
Nació en una familia de extracción humilde: su madre era analfabeta, sin embargo, le inculcó la sed de saber y le regaló su primer libro. Saramago se crió en Azinhaga y en Lisboa, donde comenzó a estudiar a los 12 años, aunque no logró completar su formación debido a problemas económicos. A partir de los 15 años combinó el trabajo con el estudio autodidacta, algo que le sirvió años más tarde para entrar como oficinista en la administración de la Seguridad Social.
Más tarde se dedicó al periodismo, a la labor editorial y a la traducción. Fue colaborador de diversos periódicos y revistas, entre ellos Seara Nova, fue también codirector del Diario de Noticias en 1975. Se adhirió al Partido Comunista Portugués, por lo que sufrió censura y persecución durante la dictadura de Salazar. En 1974 se sumó a la Revolución de los Claveles.
Su éxito con plenitud y su gran presencia mediática le llegaron con El evangelio según Jesucristo, obra que ocasionó un gran malestar no sólo en la jerarquía católica sino también en el gobierno de su país. El escándalo fue uno de los motivos que llevaron a Saramago a instalarse en la Isla de Lanzarote con su segunda mujer en 1991.
Sus últimas obras a partir de entonces llegaron poco a poco al mercado internacional, siendo Ensayo sobre la ceguera uno de sus libros más celebrados y que recibió una excelente adaptación cinematográfica en 2008.
Después de recibir el premio Nobel de Literatura su proyección se hizo mundial y su figura alcanzó nuevos niveles de polémica al manifestar, sin ningún tipo de tapujo, sus ideas en contra de la política neo-conservadora, la actitud de la Iglesia Católica y a favor de los pueblos más desfavorecidos.
Falleció a los 87 años en su residencia de la localidad de Tías (Lanzarote, Las Palmas), a causa de una leucemia crónica que derivó en un fallo multiorgánico. Saramago escribió hasta el final de su vida, pues se dice que llevaba 30 páginas de una próxima novela.
SINOPSIS
Colección de siete cuentos, cuyo eje principal son objetos, un auto, una silla, un barco. En "Silla", una carcoma va royendo el asiento de Salazar hasta que cae la dictadura. "Embargo" nos cuenta la ocupación de un hombre por un automóvil, mientras la gasolina va acabándose y la muerte se cierne sobre ambos. En "Reflujo", un único cementerio va absorbiendo todos los demás, hasta la muerte del monarca. En "Cosas" el autor imagina una ciudad sometida a una dictadura absoluta. Un último ser fantástico, mitad hombre y mitad caballo, se esconde desde hace siglo en las sombras de "Centauro". Y "Desquite" es una parábola en la que un muchacho se lanza a un río sabiendo que en la otra orilla lo espera una chica desnuda.
OPINIÓN PERSONAL
Mediante siete relatos Saramago nos va enseñando diferentes historias centradas en diversos objetos (bueno, y un centauro). Cada relato es un mundo: algunos son sublimes mientras que otros se hacen bastante pesados en algunos momentos.
"Silla", por ejemplo, es bastante lento, pero me ha gustado el hecho de que, mediante una simple silla que cae, sea capaz de mostrar un momento tan importante para la historia de Portugal, como es la caída de su dictador Salazar. Conocía muy poco de esta figura histórica, por lo que este relato me ha servido para conocer más del pasado del país vecino.
Con "Reflujo" he tenido una especie de déjà vu, ya que es muy parecido a Las intermitencias de la muerte, del mismo autor. Los dos hablan de la muerte en un país, aunque de maneras diferentes, pero no he podido evitar pensar que una de las historias le sirvió como inspiración para la otra.
El relato "Cosas" es, para mí, el mejor. Nos muestra una sociedad distópica, en la que la sociedad está dividida por clases que se diferencian por la letra que esté dibujada en la palma de la mano. El objetivo de la población es el de subir de "letra", así ser considerados superiores. Incluso se denuncian unos a otros para conseguir ese objetivo. Y de pronto los objetos empiezan a rebelarse contra las personas: una puerta que golpea en la mano a los que la abren, un sofá que tiene fiebre, edificios enteros que desaparecen... Me ha parecido magnífico, como los humanos son prácticamente objetos, todos copias de los demás, que obedecen a un gobierno que les engaña mediante los medios de comunicación. Aunque solo sea por este relato, merece la pena leer el libro entero.
El relato "La isla" también me ha gustado mucho, con una moraleja clara que busca la reflexión personal. Y el castillo con sus múltiples puertas me ha parecido curioso, como la crítica a la burocracia que conllevan esas puertas.
"Embargo" me ha parecido interesante, pero es casi como una introducción a "Cosas", porque el conflicto es el mismo: un objeto que se rebela contra su dueño. También muestra cómo se comporta el ser humano en situaciones de crisis, como es el caso de una falta de gasolina, y como todos los conductores se vuelven locos por conseguir lo poco que quede. "Centauro" me ha parecido muy lento, y con un final bastante esperado, aunque tiene momentos interesantes, como cuando se encuentra con una figura literaria española muy importante, Y por último, "Desquite" es tan corto, que prácticamente no vale la pena hablar de él, porque tampoco me ha transmitido demasiado.
"Todo hombre es una isla, es necesario salir de la isla para ver la isla, que no nos vemos si no nos salimos de nosotros."
jalil@adncultura.org