Los años heridos de Fritz Glockner
Entre cuadros de la artista plástica acapulqueña Ana Barreto, el pasado viernes 7 de febrero en el edificio de usos múltiples del Museo histórico fuerte de San Diego, Fritz Glockner, Micaela Cabañas (hija del guerrillero, Lucio Cabañas) y Solorio Almazán posaron sonrientes para las fotos. Después tomaron asiento, tres sillas, espacio vacío y los asistentes. Un diálogo de frente. La palabra fue tomada por Micaela Cabañas, la presentación de Los años heridos comenzó con el agradecimiento al público por su asistencia y rápidamente se encaminó a señalar lo mucho que significa el trabajo de Glockner, no solo para la reconstrucción de la historia colectiva, sino por la carga emocional y personal que representa para ella, al ser hija del emblemático Lucio Cabañas. En esta cuestión parece estar cimentada la reconstrucción de los hechos, en la fractura de la historia no solo nacional, sino íntima al haber vivido de cerca este contexto de resistencia. Si bien, la premisa de Los años heridos encamina a un libro sobre guerrillas, su forma narrativa y la intimidad que encierra marca la diferencia.
Los años heridos, editorial Planeta, hace una recopilación de movimientos, circunstancias, estrategias, motivos y limitantes a las que se enfrentaron -y a las que se siguen enfrentando- los segmentos oprimidos partiendo de los años 60 por defender su ideología y sus ideales, también es el fruto de más de 20 años de investigación, que busca reacomodar el pasado para entender el presente. Durante la presentación del libro, Fritz, recalcó su deseo de que este sea útil para crear nuevas utopías de la revolución. Consciente de que sería difícil conseguirlo -solamente- mediante citas y fechas, decidió hondar en los personajes para volverlos cercanos al lector y así lograr un impacto, alejándose un poco de una mirada académica. Así mismo, compartió las dificultadas que tuvo que sortear para desarrollar su trabajo, que fueron desde los lapsos de investigación exhaustiva, hasta el desgaste emocional que representa confrontar testimonios de torturas, asesinatos, desapariciones forzadas y demás herramientas que el Estado ha usado ante grupos opositores, lo que él llama una “guerra de baja intensidad”.
El público tuvo la oportunidad de externar sus preguntas y de ser testigo del dominio que tiene el escritor sobre el tema. De memoria compartía los datos, las fechas, los nombres, el contexto, todo de una manera ligera y dinámica, manteniendo la atención de los presentes. Entre los temas abordados, destacaron los medios de comunicación y el papel que desempeñan en la manera en que la sociedad interpreta las situaciones, el oportunismo histórico/político, la no idealización de nuestros representantes y la invitación a mantenerse objetivos y críticos ante la sobreinformación a la que estamos expuestos.
Por su parte, Solorio Almazán, aprovechó su participación para recalcar la importancia de conocer la historia de los personajes que aportaron a la construcción del país, de igual forma, el síndico, reafirmó el compromiso de fomentar la lectura y la educación en el puerto.
Sin más que agregar, la presentación del libro terminó, de a poco los presentes fueron saliendo hasta dejar el edificio vacío, quedando solo unas migas de canapés dispersas por el suelo, sillas desacomodadas y los colores de Barreto.
Fritz Glockner
Estudió historia en la Universidad Autónoma de Puebla, es escritor, historiador, periodista y editor. Profesionalmente se ha desempeñado como investigar, catedrático en la Universidad Iberoamericana Puebla y en Dartmouth College, en Hanover, Nuevo Hampshire, Estados Unidos. Actualmente, es director de EDUCAL, la cadena de librerías de la Secretaría de Cultura Federal.
Fotos por Iván Ortiz.
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