Mohamed Molina: un viaje musical hacia las raíces Afro-Mexicanas
En el corazón de la Costa Chica de Guerrero, donde el sonido de la artesa y la Danza de los Diablos resuena con una vibrante intensidad, el músico costachiquense Mohamed Molina ha dado un nuevo paso en su carrera artística con el lanzamiento de su más reciente disco titulado Ritmos y Voces de Maestros Afro-Mexicanos. Este proyecto es un esfuerzo por "Visibilizar el arte cultural Afro-Mexicano", un sueño que fue posible gracias al estímulo del PACMYC 2023.
El Inicio del Viaje
La historia de este disco comienza en los recuerdos de la infancia de Mohamed Molina, donde la música y las tradiciones de Cuajinicuilapa y San Nicolás se entrelazaron para formar la base de su inspiración. "Desde pequeño, ver las tradiciones como la artesa y la Danza de los Diablos me marcó profundamente. Estas experiencias, que son parte del alma de nuestra región, se reflejan en casi todas mis canciones. Los ritmos costeños de estas danzas son una parte esencial de mi identidad musical", compartió Molina.
Colaboraciones que Enriquecen
El proceso de creación de este álbum fue una aventura llena de aprendizaje y descubrimiento. Molina trabajó con músicos a quienes ha admirado desde niño, como el maestro Guillermo Sandoval, quien aportó el ritmo característico de su agrupación "Magia Digital"; Martín Lagunas que lidera al grupo "Proyecto Dos", cuya influencia en la música se siente a lo largo del disco; y Teo García, cuyo ritmo se complementa con el legado de Pegamento, el famoso músico Juan Saligan, con quien fue dueto. Además, la música de Los Inquietos, un grupo pionero en la región durante los años 70 y conocido por su estilo distintivo junto a otros grupos como El Mar Azul y Los Cumbieros del Sur, influyó profundamente en el álbum.
"Trabajar con estos músicos fue una experiencia enriquecedora. Aprendí más de lo que esperaba, no solo sobre la música, sino también sobre las historias y tradiciones que ellos aportan. La música de Los Inquietos, por ejemplo, siempre me ha inspirado, y poder incluir su influencia en el disco fue un honor", comentó Molina.
El proceso de grabación fue particularmente desafiante. "La grabación del disco fue una experiencia agotadora pero gratificante. El espacio de grabación, rodeado de fotos familiares, instrumentos y mi hamaca, donde muchas veces me inspiro, aportó una atmósfera única. Fue un proceso que combinó la tradición con la innovación, incluyendo desde los ritmos más autóctonos de La Artesa y la Danza de los Diablos hasta influencias modernas como la cultura sonidera", añadió. El disco, grabado en colaboración con El Foco Rojo Producciones de Oaxaca, captura esta fusión de sonidos y tradiciones.
La Influencia de la Familia y la Herencia Cultural
El disco está dedicado a la madre de Molina, Alba C. Rodríguez Noyola, una figura fundamental en su vida y en su desarrollo como músico. "Mi madre siempre fue una fuente de inspiración. Ella componía canciones desde joven, pero por la discriminación de la época, nunca mostró su talento públicamente. Verla cantar en la iglesia y componer corridos católicos me motivó a seguir su ejemplo y explorar mi propio camino en la música", recordó emocionado.
Molina también destaca la influencia de su familia extendida y amigos en su carrera. "La dedicación de este disco es una forma de agradecerles por todo el apoyo y amor que me han dado. Mi madre, mis hermanos y hermanas, mis musas, todos han sido una parte integral de mi viaje musical", señaló.
Agradecimientos Sinceros
Molina no escatima en expresar su gratitud. Agradece a los músicos que colaboraron en el disco, a su familia y amigos, y a todos aquellos que lo han apoyado a lo largo de su carrera. "Este proyecto es un homenaje a la música y cultura Afro-Mexicana. Espero que no sea la última vez que colaboramos en algo así. Muchas gracias a todos, y que viva nuestra música Afro-Mexicana", concluye con entusiasmo.
El Futuro de la Música Afro-Mexicana
Ritmos y Voces de Maestros Afro-Mexicanos no es solo un disco; es un testimonio de la riqueza cultural de la Costa Chica y una invitación a celebrar y preservar nuestras raíces. Con este proyecto, Mohamed Molina no solo reafirma su compromiso con la música y la cultura Afro-Mexicana, sino que también nos invita a todos a unirnos en esta celebración de identidad y tradición.
Este álbum es un puente entre el pasado y el futuro, un viaje que nos recuerda la importancia de nuestras raíces mientras seguimos adelante. Mohamed Molina y KELÉLE han creado una obra que no solo es musicalmente rica, sino también culturalmente significativa, un verdadero tesoro para todos aquellos que aprecian la diversidad y la profundidad de la cultura Afro-Mexicana.