El Arte y la Cultura en Acapulco en tiempos del Coronavirus

El Arte y la Cultura en Acapulco en los tiempos del Coronavirus

 

La cancelación de eventos culturales en Acapulco es un duro golpe para los trabajadores de la cultura. Muchos promotores y artistas vemos con preocupación cómo estas determinaciones gubernamentales van a afectar directamente en nuestra economía ya que muchos de nosotros dependemos de ellos para nuestra subsistencia. La suspensión de eventos masivos ha disminuido dramáticamente la fuente de trabajo de artistas y trabajadores culturales, afectando directamente nuestro sustento diario, si bien es cierto que todos los sectores de la economía están duramente afectados con esta crisis, el caso de los artistas es particularmente precario, casi que el mismo en el que se encuentran los sectores de la economía informal, los menos favorecidos, quienes día con día deben salir a buscar su sustento y el de sus familias. En un momento de crisis política, económica y social como la que estamos atravesando, los artistas no tenemos ninguna cobertura, ni social, ni laboral, ni económica que nos proteja ante estas eventualidades extraordinarias. Históricamente al arte y a la cultura en nuestro municipio, se le ha dado un lugar secundario y a orillado a muchos artistas a vivir en la inestabilidad económica y laboral, ahora, con esta crisis de salud pública global, es una verdadera hecatombe el no poder salir a trabajar.

También es verídico que existen estrategias que los artistas podemos implementar como ofrecer talleres on-line u ofertar productos y servicios culturales vía internet, pero lo cierto es que no hemos cultivado un público educado culturalmente y que esté dispuesto a pagar por un evento o producto cultural de calidad ya que el público en general está acostumbrado a los eventos ofertados de manera gratuita y son muchas veces las instituciones culturales gubernamentales las que asumen dichos costos. Por ello, en el espacio digital es mucho más complicado por ser más intangible y también porque, derivado de esta misma vicisitud, muchas universidades, museos y centros culturales alrededor del mundo ofertan talleres, conciertos y cursos gratuitos on-line para sobrellevar el confinamiento que implica hacerle frente a esta crisis. Y es muy paradójico, ya que es precisamente el arte y la cultura las herramientas clave para que las personas puedan permanecer en casa sin desesperarse ni sufrir la claustrofobia natural que pudiera generar permanecer confinado en el espacio de nuestro hogar: un concierto, una excelente película, visitar un museo virtual, una clase de baile, un video de interés general. El arte siempre ha estado y estará presente en nuestras vidas.

Por todo esto hago un exhorto a las autoridades culturales de los tres niveles de gobierno, a la presidenta municipal de Acapulco Adela Román Ocampo para que tenga en cuenta que así como se están tomando medidas extraordinarias y el gobierno llama a no asistir a espacios que tienen gran convocatoria, también tiene que pensar en tomar medidas en el ámbito económico para apoyar a los sectores de la cultura y a todos los grupos poblacionales menos favorecidos derivado de esta crisis mundial. Es necesario implementar mesas de trabajo entre artistas y autoridades culturales para generar estrategias que hagan frente a esta crisis pero asumiendo la responsabilidad que implica la suspensión de las actividades que generan las fuentes de ingresos de los sectores menos favorecidos socavando su posibilidad de un sustento diario para ellos y sus familias. Si no se generan fuentes de empleos o no se apoya a la población de manera real, tangible y económica, esto puede originar, cosa que nadie quiere, una caos social sin precedentes. Es el momento de la empatía, de la ayuda mutua y la solidaridad y esto empieza con el ejemplo. A grandes problemas hay que buscar estrategias reales para generar también grandes soluciones.

Del blog Puerta Abiertas.

Foto de portada Miguel Benítez Ramírez