LOS ARCOS DE TIXTLA DE GUERRERO
- Rumbo al panteón de Tixtla de Guerrero, Gro., en el marco de las festividades de los fieles difuntos, las calles son adornadas con hermosos arcos artesanales, elaborados por los habitantes de sus barrios tradicionales.
Rumbo al panteón de Tixtla de Guerrero, Guerrero; en el marco de las festividades de los fieles difuntos, las calles son adornadas con hermosos arcos artesanales, elaborados por los habitantes de sus barrios tradicionales.
Antes de llevarlos para ser colocados en la calle en dirección del panteón, la gente del barrio se reúne para que el arco sea ahumado con incienso por los que fueron participes.
Éstos arcos se colocan para señalar el camino de los fieles difuntos hacia el panteón, tiene más de medio siglo que se sigue conservando, y año tras año los arcos son instalados a lo largo de la calle Igualdad, en el barrio de Campo Santo, al oriente de Tixtla.
Los arcos de Tixtla, no sólo reciben a los muertos, si no también reciben a toda la población. Es una fiesta, una bienvenida.
Acompañada de sus danzas tradicionales para alegrar el camino hacia donde son llevados con gusto por toda la población.
El panteón de Tixtla fue abierto en el año de 1754, 300 años después de que se fundara el municipio, en el año de 1453.
Así se reciben a los fieles difuntos en Tixtla de Guerrero, muy cerca de Chilpancingo, con unos bellos arcos artesanales que engalanan el camino al camposanto.
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