Tierra de Músicos: La historia de La Sanmarqueña
Cuenta la leyenda que en el ocaso del siglo XIX nació un hombre que dedicó su vida a Dios, su concepto de la fé y el amor fue muy particular, pues encontró en la música la manera de rendir tributo a la belleza femenina y en el arte de la seducción, su manera de consagrarse al creador.
Emilio Vázquez Jiménez fue un cura originario de Ayutla de los Libres, vivió durante algunos años en el municipio de San Marcos, donde inspirado por la belleza de una joven doncella, compuso la melodía que años más tarde se volvería himno de toda una región.
Por toda la Costa Chica existen fascinantes historias que se cuentan en verso acompañadas de la melodía de una guitarra, historias que se cantan y se bailan en fiestas, serenatas, momentos de convivencia o de soledad, pero también existen grandes historias entorno a los autores de estas canciones, hombres que consagraron su vida al arte de la música pero permanecen en el anonimato.
Esta es la leyenda de Emilio Vázquez Jiménez autor de La Sanmarqueña y uno de los músicos más icónicos de aquella región.
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