Con máscaras en forma de venados, barbas de cola de caballo y orejas semejantes a las de un burro, los diablos de la Costa Chica y los Tlacololeros de Chilpancingo sorprendieron al público de Los Pastitos, Guanajuato, con una noche llena de folclor guerrerense al ritmo del Hip hop, rap y break dance o Bboying.