Música

Entrevista a Tatiana Castro Mirón

Chelista de la OFA

Tatiana Castro Mirón es chelista de la Orquesta Filarmónica de Acapulco. La siguiente entrevista no fue pactada o acordada, pero tampoco fue una charla informal en una cafetería del puerto, aunque si lo pareciera.

¿Cuál es tu nombre?
Tatiana Castro Mirón.

Bueno Tatiana, cuéntame ¿Cuándo comenzaste a tocar violonchelo?
A los 12 años.

¿12 años?
Sí, a los 12 años entre a conservatorio y empecé con el chelo. Antes tocaba el piano a los 5 años, pero necesitaba otro instrumento secundario y yo iba por el piano, y luego me cambié al chelo, me enamoré del chelo y me quede con él.

¿De dónde eres originaría?
De Guatemala.

Entonces a los 12 años ya empezaste a tocar ahí (conservatorio), ¿ya puedes entrar a los 12 años?
Si, justo el año que nosotros entramos a conservatorio, iniciaron en Guatemala un programa que era para niños, para más chicos, porque antes no existía, tenías que tener como 16 a 17 años y ese año hicieron clases especiales con maestros especializados para niños y tuve la oportunidad de entrar ahí con ellos.

Y ¿Eres de Guatemala, Guatemala?
Sí, de la capital Guatemala, Guatemala.

Existen músicos en tu familia ¿Porqué razón fue que llegaste al conservatorio tan joven, de niña?

Sí, existen. Mi papá, es guitarrista y toca el órgano, bueno y canta, pero él es lírico, es bohemio de corazón. Es muy bueno, ha hecho composiciones en el órgano, incluso se ha ganado un par de premios. Y de parte de mí mamá, esta mi abuelito, también tocaba el órgano entonces como que de los dos tengo esa influencia. Creo que por ahí también -dice mi papá, que tenía un tío abuelo creo que tocaba el violín, yo no lo conocí- entonces yo creo que por ahí, pero no sé, la verdad dicen que era muy exitoso en su época, pero yo no tengo ni idea ni quién, ósea si lo conozco por nombre, pero ya no lo conocí en persona.

¿Cuáles son tus recuerdos de niña entonces? ¿Escuchar la bohemia?
Con mi papá sí, con sus amigos que llegaban tocaban la guitarra, cantaban con el órgano, incluso mi abuelito me agarraba ya cuando yo era un poquito más grande, cuando entré a conservatorio precisamente, me compró un pedestal, con un micrófono como de niños, era como de juguete me acuerdo y me ponía a cantar sus canciones y así, incluso tenemos por ahí unos casetes grabados de eso con mi vocecita, pero digo yo, no canto profesional, ni mucho menos, pero a él le gustaba incluirme desde que era chiquita.

"...no vas a ir a la piñata, si no estudias, pero no en mala onda, sino que a modo de incentivarme a estudiar".

Y ¿Qué opinión dio tu papá de que entraras tan joven al conservatorio?
Creo que ellos, cuando me metieron a clases de baile a los cinco años estaban en la labor, porque dice mi mamá que yo de chiquita era muy inquieta, teníamos un piano en casa, y que siempre me sentaba enfrente del piano, desde chiquitita y que me ponía a tocar notas o lo que fuera así, aleatorias y que siempre decía: "Ya que no se que...", y que de repente no me quería bajar, quería seguir ahí tocando. Entonces, a muy temprana edad me llevaron con un maestro especializado, el maestro Carlos Soto, que era, bueno no, en realidad no era especializado en niños, era uno de los amigos de mi papá, un maestro del Conservatorio Nacional de Música y les dijo, que era muy chiquita, que él no me podía dar clases porqué todavía, no pues. Él fue mi primer maestro, me dio como dos, tres clases, pero es difícil ahora que yo soy mayor, dar clases a un niño, es algo complicado y me mandó con otra maestra especial, pero bueno los dos me apoyaron muy bien desde el principio, siempre me estuvieron apoyando, la verdad es que nunca tuve un “No vas al concierto” “No vas al conservatorio”, al contrario, a veces recuerdo que me decían, no vas a ir a la piñata, si no estudias, pero no en mala onda, sino que a modo de incentivarme a estudiar.

Sobre esto me imagino, ¿qué haz de considerar de tú papá y de tú abuelo cómo los músicos que más admiras?
Mi papá, la verdad es que lo admiro muchísimo porque para no obtener los conocimientos musicales que nosotros que hemos estudiado toda la vida música en el conservatorio, es... yo digo ¿Cómo le hacen para escribir?, porque yo las escucho y si tienen armonía y tienen buenas cosas que decir, ¿cómo si no estudiaste puedes hacer esto?, pero sí, lo admiro muchísimo a mi papá en todo sentido, no sólo lo musical, pero en todo sentido y a mi abuelito desgraciadamente murió cuando yo era muy chiquita, o sea, con él creo que no lo pude disfrutar, ya cuando salí del conservatorio, cuando empecé a tocar concierto, en recitales o lo que fuera pero le hubiera encantado seguro, que le hubiera encantado verme, pero sí, mi papá es una de las personas que seguro. Imagínate crecer viendo, escuchando todo el tiempo música, música y música, si.

Y, ¿con qué recital o con cuál recital debutaste como solista ?
La primera vez que toqué de solista fue en Guatemala, con la orquesta juvenil, la que está con Jesús Castillo y era un concierto para dos violines y chelo, esa fue la primera vez que tocamos de solista y es la primera vez que sentí los nervios de pararte frente a un público, enfrente de la orquesta incluso, eso fue hace muchos años.

¿Alguna anécdota que te haya pasado en algún concierto?
Nunca se me olvida una vez que tenía un dúo, teníamos un recital de piano, con mi compañera pianista Jaqueline Olizaba. Yo me lastimé el tobillo, tenía yeso en el pie, me acuerdo perfectamente bien y como dos días antes del recital mi amiga se cae, se lastima el pie igual, ósea las dos teníamos el yeso con la misma bota igual, nada más que el yeso de diferentes colores, pero entramos al recital y las dos nos quedamos viendo así como, ¡Ah! Todos van a verlo como si nos pusimos de acuerdo o así. Esto no tiene nada que ver con la música, pero fue algo muy gracioso, no sé, no se me olvida, incluso sentíamos como que la gente nos veía, como que se reía, pero fue un recital muy bonito. Por cierto, yo ya estaba estudiando en Miami. Ella se fue a estudiar conmigo allá en Estados Unidos, en la universidad de Miami y regresamos a Guatemala a tocar ese recital. Si, porque de ahí de una anécdota musical, así que me haya pasado algo ninguna, siempre hay algunas cositas que nos dan risa a nosotros los músicos pero no, nada fuera de lo común.

Aparte del profesor que me comentaste, ¿qué otro recuerdas y porqué razón?
Al maestro Alfredo Masariegos, ese fue mi maestro de chelo desde que empecé con este instrumento, y yo creo que gracias a él toco lo que sé, porque estudié en la universidad, pero yo ya iba por todo lo que él me enseñó y aparte de eso fue como, pues no se, digamos como papá, una figura paterna, como un guía en mi vida y era muy estricto. Si el maestro Masariegos, fue mi primer maestro y se podría decir que casi mi único maestro, bueno aparte de la Universidad en Miami, fue que tuve otro maestro, el maestro Kim Bradinson y la maestra María Antonieta Abraham, porque ella me enseñó el piano, ella fue la que me recibió cuando era chiquita.

Menciona una pieza, ¿qué digas, qué todo violonchelo puede tocar?

Pues yo creo todos los chelistas deberíamos tocar el concierto de Dborák, para chelo y orquesta; si es para mi uno de los más bonitos, uno de los más complicados musical y técnicamente.

¿Qué consejo darías a alguien que va comenzando con el chelo?

Podría decir que al principio todos los instrumentos parecen como complicados, siente que uno no avanza, te tienen pasando arco como dos meses, no ves avance y te desesperas, eso es como aprender a caminar, aprendes a caminar bien y ya puedes correr, ósea necesitas aprender, como que el primer año es lo más difícil y lo más tedioso, te podría decir porque no aprendes, como que muchas canciones o estudios, son solo cosas técnicas o sea súper elementales para poder estudiar, pero que no se desesperen y que cuando menos lo sientan, si tienen eso todavía, todo va a venir mas fácil adelante.

¿Por cierto participas en alguna escuela de orquesta infantil?
Estaba dando clases en la de Bonfil, dí como cinco años en el proyecto de Núcleos de Renacimiento, solo que yo estaba en Bonfil, en septiembre-octubre del año pasado, ya deje de participar, por cosas familiares, pero si, di cinco años clases ahí.

"...Y dije, no pues Acapulco, ósea, casi que ni lo pensé, así como lo dije como un minuto y no pues, Acapulco. Dije: ¡ah bueno, Si!".

¿En qué momento llega la OFA a tu vida?

Es algo muy chistoso, porque cuando me vine a México, bueno me fui a Toluca primero y después viajaba con unos compañeros que estaban en la Orquesta de Pachuca y había una plaza libre en Pachuca, entonces me dije: "Bueno, pues si van todos, voy a ir a ver si puedo quedarme a audicionar". Resulta que el maestro, bueno yo no sabía, audicioné para el maestro director de la de Pachuca y estaba la concertino Cecilia, había otros maestros ahí, no recuerdo quienes y me dicen: Sí, si nos gusta mucho, ¿Dónde quieres ir, quieres en Pachuca o quieres en Acapulco?, y yo pues -pensando, ¿Pachuca? ¿Acapulco?- era mucho más joven, ya tengo aquí 14 años casi 15, entonces imagínate decía: ¡Wow, Acapulco\", pues, ya sabes, uno cuando está mas joven. Bueno todavía a mí me encanta Acapulco, me gusta mucho. Y dije, no pues Acapulco, ósea, casi que ni lo pensé, así como lo dije como un minuto y no pues, Acapulco. Dije: ¡Ah bueno si!. Ya para entrar -a la OFA- tuve un poquito de problemas, por mi estatus migratorio porque yo estaba como estudiante en Toluca, tenía una beca, entonces me tardé como un año todavía para entrar aquí, pero todo se dio, se fue dando, logré entrar y aquí estoy desde el 2005.

¿Qué significa para ti la OFA, después de una trayectoria de tantos años?
Ya son 13 años, desde el 2005 hasta hoy, bueno 14 ya casi, ¿qué significa la OFA? significa mira, cuando soy más feliz, es cuando estoy tocando una obra que apasiona, cuando te pierdes en la música, significa ya sabes, con todos los problemas que hay, de todo lo que sea, los problemas que haya en Acapulco o incluso si tienes algún problemas familiar o personal cuando llegas a la orquesta y tocas el chelo o instrumento que toques, como que perderte en eso, es como una escapada de todo eso, solo piensas en la música y en disfrutarla nada más, ponerte en esas dos-tres horas de ensayo o de concierto que hacemos, es música, nada más disfrutarlo, es como una escapada digamos.

Y ya para finalizar, ya casi, ¿En qué otro ámbito te gustaría estudiar?
A otro instrumento, te refieres a otro instrumento.

Sí, claro.

Me encantaría tocar muchos instrumentos, pero es muy, ósea creo que no es bueno, no se si es posible, no conozco a alguien que no, bueno si que toque muchos instrumentos, pero que sea exitoso en los 5 instrumentos, ¡Mmm!, no sé me gusta el saxofón, me gustaría aprender a tocar el saxofón, como por nada más por aprender y creo que nada más, así como me preguntas, que otro instrumento me gustaría tocar, si el saxofón me gusta.

Ahora si para finalizar ¿Te ha enamorado la música guerrerense?
Si me gusta, me gusta mucho el ritmo de la música guerrerense, en orquesta aparte tocamos mucha música de Guerrero y tengo la oportunidad de conocer mucha música, los arreglos que tocamos, son muy bonitos y si me prende todavía, después de tantos años de estar tocando la música de Guerrero, una de mis favoritas es la de Ometepec, siempre que la toco me gusta, me gusta mucho cada vez que la toco, o sea, no hay un así como “otra vez lo mismo”, ¿no?, si me gusta o por Los Caminos del Sur, me gusta el ritmo, además que es muy particular, muy peculiar es muy diferente a mucha música.

"...No me acuerdo que haya llegado una Orquesta a mi colegio y decirme “Mirar estos instrumentos, este y este... así funcionan, así suenan”.

Una más, ¿Qué te parece pertenecer a una orquesta, qué sea tan dinámica, por así decirlo? ¿Qué haga tantos conciertos al año? ¿Hace aproximado como más de 80 conciertos al año? ¿Una Orquesta qué recorre todo Guerrero?

Claro, se siente súper que seas reconocido por la gente, cuando los ves aplaudiendo, los aplausos son para nosotros un significado, si no tenemos aplausos, para eso tocamos ¿No?, la verdad es que, se siente así como ahorita que me dijiste algo, así como... ¿Te puedo hacer unas preguntas?, y yo si claro, por supuesto, no sé, aparte del trabajo que hacemos con la Orquesta de llevar música a los lugares que jamas en la vida se imaginaron que iba a llegar una Orquesta Filarmónica, ese trabajo que hace el maestro Álvarez con la orquesta, me parece muy importante, porque poco a poco la gente va conociendo y como tú dices, ya ahora nos conocen, como decir “¡Ah! Ya viene la Filarmónica” o a veces la piden no, “Queremos que venga la Filarmónica”, y siempre tocamos música de Guerrero, pero siempre le metemos un poquito más de, bueno, el maestro le pone otro tipo de música, como para ir como en música decimos "Educando el oído", ir educando el oído como música clásica, películas, música de infinidad, y creo que es un trabajo, igual los conciertos didácticos para niños, que aprendan a mi, yo me acuerdo, bueno es más, no me acuerdo que haya llegado una Orquesta a mi colegio y decirme “Mirar estos instrumentos, este y este... así funcionan, así suenan ”, eso es muy importante también, creo que a los niños les gusta y en verdad si se interesan, se interesan tanto que luego van a los proyectos de todas las orquestas infantiles que hay en el puerto, la Azteca o de Renacimiento.

Al final solo nos despedimos, me preguntó cuando sería publicada. Hoy que es su cumpleaños, es un buen momento para publicarla.

miguel@adncultura.org